Cuando terminamos de comer una rica cena o una exquisita comida en A Costa da Morte, siempre nos preguntamos lo mismo, ¿nos tomamos un postre o no? ¿Por qué tenemos esta necesidad? ¿Es sano o no lo es? En este artículo vamos a responder a esta pregunta.
Comer postre nos apetece porque, al hacerlo, completamos el ritual de la comida. Para los españoles, sentarnos a la mesa no significa solo ingerir comida, es un momento importante en el que nos sentamos con nuestros seres queridos, hablamos, nos contamos cómo ha ido el día y disfrutamos. Es un momento de paz, es un ritual. Y si nos hemos sentado a comer tras disfrutar de un largo paseo por Camariñas, apetece más, ¡ya que el cuerpo nos pide azúcar!
Y ese ritual implica tomarse algo antes, un primer plato, un segundo y un postre. Cuando comemos así nos sentimos bien, como si ayudaramos a la tradición a seguir adelante. No hay nada más triste que una comida de un solo plato engullida en diez minutos. Eso no es comer. ¿Por qué no tomamos postre tras unas tapas? Porque comer es comer, y picar algo es distinto.

Comer postre es mucho más que comer un dulce
Comer postre después de comer tiene otro poder fantástico, nos transporta a nuestra infancia. Nos recuerda a nuestro padre o a nuestra madre recompensándonos por comer algo que no nos gustaba con un rico yogur, un helado o una fruta dulce. Por eso, sentir cómo una tarta de queso, un heladito o el chocolate pasa por nuestra garganta nos devuelve a nuestra infancia.
Es por estos dos factores por lo que comer un postre es tan importante para nosotros, y por lo que siempre diremos que sí desde nuestro restaurante en Camariñas. Además, un rico postre casero y elaborado con productos naturales, como los nuestros, nos recompensa el alma.
Nos esforzamos siempre en comer bien y en cuidarnos, y eso es bueno para nuestro cuerpo y nuestra salud, pero cuando recompensamos nuestro trabajo con un postre rico y ligero hecho por cocineros expertos, nuestro espíritu disfruta. Así que si quieres reencontrarte con el niño que hay en ti, con la tradición y con tu alma, ven a visitarnos. Los postres en A Marina de Camariñas te encantarán.